Taylor Swift se venga de Katy Perry el día que la cantante volvía a la industria musical

Ha estado casi cuatro años sin publicar ningún álbum discográfico pero el viernes 9 de junio la incansable espera se acababa. Katy Perry ha alegrado el mes a todos sus seguidores al aterrizar con su nuevo y ansiado trabajo. 'Witness' llega con 15 temas de los que ya se han podido escuchar tres de ellos, 'Chained to the Rhythm', 'Bon Appétit' y 'Swish Swish'. El esperado día ha llegado y lo que debería ser todo un derroche de felicidad no ha cumplido con las expectativas.

La encargada de amargarle el día a la cantante californiana no ha sido otra que Taylor Swift. Desde que se declarasen oficialmente archienemigas no han parado ni un solo momento de intentar robarle el protagonismo la una a la otra. Pero no siempre ha sido así, durante los años en los que ambas se encontraban consolidando su carrera, las dos artistas aparecían llevarse la mar de bien. Posaban juntas en las entregas de premios, se felicitaban el cumpleaños y se dedicaban mensajes en Twitter alabando sus carreras. Pero un buen día todo se torció.

La mayoría de la gente piensa que la enemistad entre las cantantes surgió por una disputa por tres bailarinas pero no es así. Todo comenzó cuando en el año 2012, la intérprete de 'I Kissed a Girl' empezó una relación uno de los tantos exnovios de Taylor Swift, John Mayer. Parece que a la antigua cantante country no le sentó nada bien y prefirió servir la venganza en plato frío. Y sí, como era de esperar la de Pensilvania se la devolvió. Katy Perry finalizó su gira y se encerró en el estudio de grabación para preparar su nuevo álbum, fue entonces cuando tres de sus bailarines le pidieron permiso para embarcarse en una gira mundial con Taylor Swift. Según Katy Perry, ella aceptó encantada pero les avisó que en apenas uno año y medio se volvería a subir al escenario para poner en marcha otra nueva gira y si ellos querían estar con ella deberían de avisar primer a Taylor Swift.

Al parecer, cuando Taylor Swift se enteró de que los bailarines la dejarían de lado para irse con la otra cantante, ella misma decidió despedirles. Desde ese momento, la trifulca se hizo pública y las declaraciones que se harían la una a la otra en las entrevistas que realizaban no cesarían. Eso sí, Taylor Swift nunca mencionaría el nombre de su enemiga aunque siempre se entendía que se dirigía a ella. La revista Rolling Stone consiguió entrevistar a la intérprete de 'Bad Blood' para preguntarle por el significado de este tema y ella sin ningún tipo de tapujo contestó: "Nunca he estado segura sobre si éramos amigas o no. Se me acercaba en las entregas de premios y me decía algo y se iba, y yo pensaba: '¿ De verdad somos amigas o me acaba de insultar de la manera más cruel?' Me hizo algo terrible. Y entonces fue cuando pensé 'oh, somos enemigas'. Tenía que ver con el trabajo. Básicamente trató de sabotearme una gira entera. Intentó contratar a un montón de gente de mi equipo sin que me enterara".

En la letra de la canción 'Bad Blood', Taylor Swift lanza alguna pullita a la que era su amiga pero todo quedó mucho más claro cuando la cantante publicó el videoclip del tema. En el se puede ver como Selena Gomez interpreta a una chica morena que pelea con Taylor Swift por un maletín hasta que la tira por la ventana de un edificio. Por otro lado, Katy Perry ha preferido utilizar otra arma: su cuenta de Twitter. La intérprete de 'Roar' ha publicado varios mensajes en internet donde deja entrever que la otra artista es "la Regina George con piel de cordero". Además, en otra de las sonadas peleas que tuvo Taylor Swift con Nicki Minaj en la red social del pájaro, Katy Perry lanzó un mensaje sin nombrar a nadie pero donde dejaba todo claro: "Siempre he encontrado irónico presentar el argumento de poner a las mujeres en contra de otras mujeres cuando una se aprovecha sin medida de derribar a una mujer".